viernes, 22 de junio de 2012


POSIBLES CAUSAS DE LA MORTANDAD
El evento fue llamativo, muy pocos padrillos murieron, y casi todas las tropas-harén perdieron integrantes pero no murieron todos. Los sobrevivientes no estaban en mejor condición que los muertos. Muchas crías que sobrevivieron eran chicas, de unos días y no tenían ningún daño.
Las causas probables de muerte fueron estrés e hipotermia, o shock eléctrico por caída de rayos. No se realizó ninguna necropsia, aparentemente las autoridades de aquel momento temían que se detectara una enfermedad infectocontagiosa para el ganado y le achacaran alguna responsabilidad. Era obvio que no había tal cosa, de echo murió mucho ganado en campos vecinos y de toda la región, no solo caballos, sino vacas y ovejas. 
Muchos cimarrones encontraron un refugio adecuado y sobrevivieron, parece lógico que si los números no hubieran sido tan altos, las muertes hubieran sido menos...
Así en noviembre de 2002 la población perdió al 30 % de los caballos cimarrones que habitaban la reserva. Suena terrible, y en muchos sentidos lo fue, pronto comentaré que pasó luego con los sobrevivientes. 

Fotos de sobrevivientes, durante el trabajo de 12 y 13 noviembre 2002, escaneadas de diapositivas.

MORTANDAD MASIVA  EN 2002.
El día 11 de noviembre un colega que investigaba zorros pampeanos me llamó para avisarme de la mortandad ocurrida. Viajé al parque y durante dos jornadas de 12 y 8 horas de caminata y toma de datos registré la mortandad. Aún hoy me parece verlo, muy fuerte!! Queda en la memoria para siempre…Tengo fotos que tomé para documentar ciertos datos, unas pocas las usé en la tesis y en congresos, la mayoría no quise mostrarlas y no voy a compartirlas…
En los días 9 y 10 de noviembre del 2002, en el Parque Provincial Tornquist se produjo una tormenta de lluvia muy violenta, acompañada de fuertes vientos y descargas eléctricas, que ocasionó una mortandad masiva en la población de caballos cimarrones que habita en la reserva: 193 caballos cimarrones muertos. La tormenta que provocó la inusual mortandad masiva de caballos cimarrones presentó las siguientes características: la lluvia caída en 48 horas totalizó 235 mm y durante ese lapso se produjeron numerosas descargas eléctricas. El viento, de dirección S, sopló continuamente a velocidades entre 50 y 80 km/h durante más de 36 horas. La temperatura disminuyó bruscamente desde una máxima de 26 °C y una mínima de 11 °C, registradas el día previo a la tormenta, hasta temperaturas máximas de 11 °C  y   8 °C, y  mínimas de 6,5 °C y 6°C  en los días 9 y 10 de noviembre respectivamente.
Les incluyo esta tabla, algo técnica tal vez pero que resume bien los hechos.
Tabla III.1. Cantidad de caballos cimarrones muertos por clase de edad y sexo, expresado en número de individuos (N) y porcentaje del total de animales muertos.


Edad

Machos

Hembras

Sexo no identificado


Total 
de muertos


N

%

N

%

N

%

N


Crías

3

2

7

4

2

1

12



Añales

26

13

22
   
     11

1

0,5

49



de 2 años

25

13

20

10

1

0,5

46



Adultos

12

6

62

32

1

0,5

75



No identificada

5

3

4

2

2

1

11


     
Total

71

37

115

59

7

4

193





MANEJO DE LA POBLACIÓN
¿Porqué hay que manejar o controlar una población?
¿Porqué no dejarla crecer indefinidamente?
Cualquier herbívoro, sea silvestre o sea caballo cimarrón consume una parte del total de los pastos disponibles en un determinado momento. Si el número de animales crece, como suele ocurrir cuando no hay abundantes predadores, llega un momento en que el alimento no puede mantener la salud de todos. Cuando esto ocurre, cada vez es mayor el número de animales que muere de inanición, sobre todo en la temporada desfavorable, y también suelen nacer menos crías, esto continúa hasta que el crecimiento de la población se frena. Claro que entonces mueren números altos de animales y muchos están flacos. Además en esos períodos el ecosistema sufre el mayor impacto, la altura de los pastizales es mínima y se observa mucho suelo desnudo.
En caballos cimarrones los grupos más vulnerables son las hembras con cría, los animales de 1 año casi todos ya destetados por sus madres, y los de 2 años (muchos de ellos dejan su tropa natal para pasar a una nueva, y en la jerarquía del grupo, típica de équidos, están en el último escalón).
Esto ocurrió en el Parque Tornquist, fue muy fuerte en 2000, 2001 y 2002, y ya se venía observando gradualmente en 1998 y 1999.
Siempre propuse que se efectuara algún control para que no se llegara a ese límite.
La falta de manejo permitió esta situación. Para mi esto fue cruel, ya que muchos animales, incluso más de 80 por año morían de hambre, y pocos podían verlo. En esos años las autoridades discutieron en muchas reuniones pero no se hizo nada.
La situación cambió drásticamente en Noviembre del 2002 cuando durante una tormenta ocurrió una mortandad masiva…En la próxima entrada les contaré.


¿CUANTOS MORÍAN AL AÑO?

La “supervivencia” se calcula como el % de caballos de una cierta edad y sexo que siendo vistos en los censos de inicio de año (enero-febrero) siguen vivos al finalizar ese mismo año.
No era posible, ni práctico capturar a los caballos y determinar su edad observando su dentadura. En base al tamaño del cuerpo y largo de la cabeza, y al largo de la cola y crines, se puede clasificar a los caballos en “edades”: crías, animales de 1 año, de 2 años, y adultos (3 o más años).
Cómo muchos machos no tienen tropa-harén y andan en tropas de “solteros”, se estudia solo las hembras. Las yeguas adultas mostraron una supervivencia de 88 %, las de 2 años 88 %, las de un año 89% y las crías hembras 94%.
¿Cuáles fueron las causas de la muerte?
No es fácil observar a todos los caballos cimarrones que mueren y averiguar la causa precisa necesita que un profesional  (por ejemplo un veterinario) realice una necropsia.
En el Parque Provincial Tornquist la población de pumas desde 1990 ha sido escasa, en todos los años de estudio solamente en dos oportunidades pude observar caballos cimarrones claramente muertos por ataque de puma, y se trataba de potrillos cercanos al año de edad.
El pastizal crece principalmente en primavera y otoño, siguiendo los picos de lluvias más importantes. A fines del invierno y del verano el pasto comestible y nutritivo es escaso, y en los años en que la población de caballos cimarrones alcanzó números altos (500-700) era muy evidente el deterioro de la condición corporal, las yeguas adultas con cría, y las jóvenes de 1 y 2 años estaban muy flacas, algunas muy desnutridas. Era muy claro que muchas de ellas morían de hambre, también es posible que algunas enfermaran y solo algunas morían de viejas. En promedio entre 2000 y 2002 morían unas 45-50 hembras adultas, jóvenes y crías.
Se calcula que el número de machos muertos era similar, pero es muy difícil comprobarlo porque entre 1 y 3 años de edad la mayoría de los potrillos machos se alejan de su tropa natal y forman pequeños grupos de “machos solteros” que andan por toda el área vagando, y muchas veces cambian sus integrantes.


ALGUNOS DATOS SOBRE ECOLOGÍA DE LA POBLACIÓN

Una de las preguntas que quería contestar era cuantas crías nacían y cuando.

La “fecundidad” la medimos como % del total de yeguas adultas de 3 años o más de edad que tuvieron cría. Se sabe que en condiciones óptimas, cuando hay pocos caballos y mucho alimento las yeguas pueden quedar preñadas al año y parir a los dos años de edad. Esto no lo observamos en la reserva. Las yeguas cimarronas pueden tener cría incluso hasta los 17 o más años de edad, prácticamente durante toda su vida.

Esto se estudió tratando de observar todas las tropas-harenes en cada mes de la temporada.

Con los datos obtenidos desde enero de 1995 hasta diciembre de 2002 vimos que la fecundidad de las yeguas adultas fue en promedio de 55%. Comparado con caballos cimarrones de otros países este valor es intermedio. Es común que muchas yeguas cimarronas no tengan cría todos los años, por el gasto energético de la gestación y la lactancia.
Los primeros potrillos nacieron en las última semana de agosto y primera de septiembre, la gran mayoría nació en octubre y noviembre (65%), algunas crías nacen en enero, febrero y las últimas en marzo, e incluso primera semana de abril.

martes, 19 de junio de 2012


¿CUAL ES MI POSTURA RESPECTO AL MANEJO DE LOS CABALLOS CIMARRONES?
Como les conté me gustan los caballos cimarrones, y la naturaleza, por eso los estudié pasando muchísimas horas en las sierras observándolos, conociéndolos…
Nunca en mis trabajos, ni en mis charlas, clases  o en reuniones científicas dije que quería que los erradicaran. Siempre mencioné la necesidad de controlarlos, de manejar el número, respetando el valor cultural y su bienestar como animales. 
Nunca asesoré a la gestión del ministro Rivara para decretar la erradicación, ni estuve de acuerdo con el mal manejo que se realizó, casi en secreto, sin apoyo de las Universidades, y sin un Plan escrito con consenso técnico.
En muchas reuniones previas al 2006, con autoridades de la Provincia, del Municipio de Tornquist, vecinos, guardaparques…siempre estuvo abierta la posibilidad de conservar un núcleo de caballos cimarrones.

Algunas aclaraciones:
·        En Manejo de Vida Silvestre y Biología de la Conservación erradicar no significa necesariamente matarlos. ..aunque para muchos políticos sí.
·        Cuando mamíferos herbívoros están en un área restringida, y los predadores naturales son escasos, suele ocurrir que el número de animales crezca hasta que el pasto no alcance más para mantener a todos bien nutridos, y muchos terminen muriendo de hambre. A la vez el ecosistema, con sus miles de especies de plantas y animales se modifica, ocurre impacto serio, se amenaza la conservación de la biodiversidad. Se dice que hay sobrepastoreo,  esto ocurrió en el Parque Tornquist entre 2000 y 2002. Ojalá no se vuelva a repetir.   Por esto es necesario un manejo de la población de caballos cimarrones. 

Ahí no terminó la historia, y en el 2000 decidí continuar estudiándolos, inicié nuevos muestreos, que luego serían la base de mi doctorado, que terminé en 2007. Muchas cosas ocurrieron en esos años, que iré contando de a poco: la población creció hasta llegar a tener en marzo de 2002 casi 700 caballos en las 2000 hectáreas que ocupan; en Noviembre de 2002 durante una violenta tormenta ocurre una mortandad masiva, 193 mueren; en 2006 y 2007 el Ministerio de Asuntos Agrarios retira del Parque unos 220 caballos (ya hablaremos en detalle de esto).  
Luego del Doctorado he continuado tomando datos de la población hasta la actualidad, no tan seguido, ya no tengo 30 años, ni 40. Estoy midiendo la condición corporal de los caballos cimarrones y viendo como varía a medida que la población crece. Siempre interesado en un Manejo que no perjudique a los caballos y que permita conservar el ecosistema de pastizal del que ellos también dependen.  



¿Porqué estudié los caballos cimarrones?
Cuando comencé a visitar el Parque Provincial Ernesto Tornquist a fines de 1988 recién me recibía de Licenciado en Ciencias Biológicas,  siempre me interesó la conservación de la naturaleza, me gustaban los animales y especialmente las aves y los mamíferos.
A principio de los 90 me enteré que las autoridades del Parque y algunos biólogos creían que los caballos cimarrones eran un potencial problema para la conservación de la biodiversidad en la reserva y nadie los había estudiado formalmente.
Había visto a los cimarrones en varias salidas en la reserva y me encantaron!! Varias preguntas se me ocurrían: ¿Cuantos había?, ¿Crecían en número?, ¿Cuántas crías nacían y cuándo?¿Cuántos morían y porqué causas?...
Así fue surgiendo mi primer proyecto que inicié en 1995, viajé al Parque Tornquist todos los meses, los primeros meses cada quince días. En cada campaña me quedaba dos días, y cada día recorría a pie unos 10 km observando los caballos cimarrones y tomando datos. Pude ver como se organizaban en tropas-harenes, custodiadas por el padrillo y dirigidas muchas veces por una yegua. Usando binoculares y reconociendo los pelajes y marcas características en cara y patas, empecé a reconocerlos…y a llenar planillas de identificación. Así tome datos hasta fines del año 1998, y terminé mi primer posgrado, Magister en Biología en 1999. La idea central era, además de conocer la ecología de los caballos cimarrones,  aportar información para poder efectuar un manejo adecuado, respetando el bienestar de los caballos y teniendo en cuenta el valor cultural que tienen. Por ejemplo saber cuántos  había que retirar u ofrecer en adopción para que la población no llegara a tamaños demasiado grandes, si alguien decidía hacerlo. (Para erradicarlos no hacía falta ninguna investigación sobre los caballos…)

miércoles, 13 de junio de 2012



Los caballos cimarrones del Parque Tornquist: 
No se conoce con certeza el origen de esta población, y creo muy posible que existieran previamente caballos cimarrones en el Parque. Es un tema lindo para el que le guste, entrevistar a "nuestros mayores" en las estancias y localidades de la zona serrana para documentar sus opiniones y recuerdos. Así sabremos más sobre este punto... 
Si bien no habría documentación al respecto, la versión oficial de las autoridades de Areas Protegidas de los años 80 y 90 era que el gobierno de la Provincia de Buenos Aires habría recibido en 1942 una donación por parte del Sr. Emilio Solanet consistente en un pequeño grupo de caballos criollos, no se sabe si los animales estaban amansados. Los animales fueron liberados en el Parque Provincial Ernesto Tornquist,  sin que se sepa los motivos de esa decisión.

En el año 1995 la población incluía 400-450 caballos cimarrones en un área aproximada de 2000 ha, lo que representa una densidad de 20-22 caballos/km2. De 1995 a 2002 la población creció a una tasa del 6% anual, hasta llegar a 650-700 caballos cimarrones a principios de 2002, cuando en promedio la mortalidad por desnutrición sumaba unos 85 animales de distintas edades al año. 

En noviembre de 2002 se registró la mortalidad simultánea de unos 192 ejemplares en asociación con una violenta tormenta de lluvia con descargas eléctricas(en una futura entrada comentaré sobre esto). 
Luego de este evento la población volvió a crecer pero a una velocidad menor, posiblemente en respuesta a las condiciones de sequía que afectaron al área en los años subsiguientes. 
En 2006 y 2007 el Ministerio de Asuntos Agrarios decretó la erradicación  y emprendió acciones de manejo que incluyeron el el retiro de unos 220 caballos de la reserva. Tengo que aclarar que nunca fui consultado sobre este manejo, ni manifesté estar de acuerdo. En todos mis trabajos siempre hablé de controlar la población, y sigo creyendo que es la mejor opción.

A principios del año 2008 la población se calculaba en unos 200-250 caballos cimarrones y actualmente (junio 2011) se estima que existe en la reserva un mínimo de 300-350 caballos cimarrones.